Pues como lo prometido es deuda y nosotros somos gente de palabra, esta mañana nos hemos dado un buen madrugón, para llegar al campo de vuelo de los amigos de AirWind a las 7:30h y aprovechar a volar con el despunte de Lorenzo el rubio y por el tiempo que prestara.
El campo es de tierra fina bien compactada y lo tienen extremamente cuidado. Como podéis ver en las fotos, apenas hay brizna de hierba pues tienen preparada una azadilla que me da que sacan a diario de paseo. Si fallamos un despegue allí, difícilmente podremos echarle la culpa a un enganchón de cordinos...
La verdad es que ya a esas horas hacía calor pero el amplio valle de campos donde se enclava su zona de vuelo era todavía una suave balsa de aceite.
Por eso de que allí no tienen un techo tan minúsculo como el que hemos de respetar aquí y por esas sugerentes nubes que tapaban los primeros minutos a Lorenzo, me fui derecho para allá arriba, pero resultó que ese penacho de nubes no estaba tan cerca ni tan bajo... Otra vez será!
Cerca de las 9:00 y por encima de los mil metros se mantenía todo en calma pero al bajar de esa altura ya empezaban los empujones de metro en hora punta...
Cerca del suelo aún se estuvo razonablemente cómodo un tiempo más, que fue el que aprovechó Pedro.
Aquí os cuelgo algunas fotos del día donde podéis ver lo que os contaba en estas líneas:
Antonio de Sonseca aterrizando!
Pedro despegando.
Pedro en pasada rasante!
Aquí tenemos a Pedro tomando tierra.
José Ramón, Antonio y Juan han sido unos muy buenos anfitriones. Además nos han invitado a una concentración que harán a primeros de Octubre, aunque les visitaremos antes con toda seguridad.
Nos vemos!
Muy buena crónica David
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